¿Que yo no puedo? Mira como lo hago...
-¡Qué no! Que no vale para nada Débora, ponte a trabajar y déjate de tonterías. ¿No ves que bien situada está la hija de la vecina? trabaja en un bufete de abogados, de administrativa, de lunes a viernes, eso es lo que tendrías que…..
Y mientras yo la miraba, lo único que pensaba era “Voy a hacer, voy a llamar, voy a mirar, voy a estudiar, voy a pedirle los apuntes, etc”
Muchos de nosotros, hemos querido emprender, pero hubiera sido más fácil, si las personas que nos rodean, son un pelín más positivos.
Entiendo la preocupación que pueden tener algunos padres o familiares a la hora de arriesgarnos, entiendo que sufren por que piensen que a la primera de cambio, o a la primera caída (que en todo emprendimiento hay caídas) nos vamos a rendir, y vamos a volver a empezar, pero esta vez en un trabajo convencional.
He decidido darle la bienvenida de nuevo a mi blog, porque mi idea es darte ese chute que necesitas, para recordarte, que solo depende de ti que todo salga bien.
No, para nada emprender es un camino de rosas, para nada, tener tu propio horario hace que el trabajo sea más llevadero, y para nada emprender es sinónimo de éxito en dos días.
Te recuerdo, que antes de llevar a cabo una idea, o comentar con amigos, ha estado rondando por tu cabeza varios meses o días, eso significa que se ha llevado muchas horas de tu pensamiento
- Te recuerdo, que la persona que se pasa horas mirando e inspirándose a la hora de crear o empezar a crear eres tú.
- Te recuerdo, que la persona que sufre por que necesita ventas, para demostrar (se) que no ha sido un error eres tú, por lo tanto, es la misma que va a estar horas y horas dándole vueltas a la cabeza, para dar con la idea perfecta.
Coge papel y boli, ponte en una habitación, ponte tu banda sonora favorita y escribe ideas, notas, reflexiones, frases, y verás cómo fluyes.
Dale la oportunidad a la persona:
- Que un día creyó en ti, de ver que no se equivocó.
- Que cogió toda su imaginación y lo empezó a proyectar, sin pensar en nadie, solo en ella misma.
- Dale la oportunidad a tu yo interior de sentirse orgulloso.
- De poder levantarse por la mañana, mirarse al espejo y repetir:
Te dije que lo conseguirías, y aquí estamos, disfrutando del proceso.
Tu puedes, claro que puedes
Y recuerda algo, que a mí me ha servido durante mucho tiempo:
El éxito es como los pedos, la gente se molesta cuando no es suyo